Opinión

ANÁLISIS: CHILE Y BOLIVIA EN LA HAYA

Bolivia exige obligación de negociar

Jueves 7 de mayo

JE Cheyre cuadrLa intervención de la delegación de Bolivia se ajustó exactamente a lo que se había previsto. Eludiendo el tema de la competencia, tratando marginalmente la vigencia y contenido del Tratado de 1904 e interpretando ligeramente el artículo VI del Pacto de Bogotá como "una varita mágica que resuelve todo tipo de jurisdicciones", los abogados buscaron llevar el debate al tema de fondo.

En tal sentido fueron claros, directos, audaces y explícitos descalificando el debate de la competencia por cuanto ellos piensan que la corte no puede "dejar sin efecto la solicitud (de Bolivia) sin escuchar los méritos de la misma". Remiro Brotóns desafió a la corte cuando estableció "si la corte acepta lo que plantea Chile, su decisión llevará a una resolución en el fallo sobre el fondo a favor de Chile" y el abogado Akhavan calificó a la objeción de Chile como falsa que "incluso si fuera una objeción correcta no sería una objeción preliminar". Quedo clarísimo que Bolivia apuesta a una reinterpretación del derecho. Pretende poner por sobre la vigencia de los tratados el valor y obligatoriedad que adquirirían los actos unilaterales que tipifican en una "voluntad reiterada de negociar de Chile" que sería independiente del Tratado de 1904. Según ellos se generaría así "una obligación exigible" a nuestro país.

Rodriguez Veltzé al inicio advierte lo que espera Bolivia de la corte. Citó que el Presidente Morales "pide que se cumpla la obligación de Chile de negociar". Se aclara lo que habíamos advertido. Bolivia aspira a que un tercero, en este caso la corte, exija a Chile a ceder espacio terrestre y marítimo para resolver lo que califican como "una situación pendiente" donde Chile habría creado "expectativas jurídicas legítimas".

Fundamentan su posición en un largo relato de iniciativas que describen como compromisos de Chile para negociar una salida al mar. En su argumentación eluden entrar a un análisis de estos actos en cuanto a su origen, carácter, causas de su desenlace ni espíritu que los animó. Es más posicionan en el año 2011 el momento en que nuestro país habría abandonado su "compromiso de negociar".

Fue una jornada intensa y provocativa. Será compleja la contraargumentación, ya que se eludió el tema de la competencia. La corte tiene un caso donde Bolivia resta valor a los tratados y eleva a un nivel de mayor jerarquía supuestos acuerdos inconclusos que son muestras de buena fe más que reales obligaciones jurídicas exigibles.

  

Contundentes fundamentos

Martes 5 de mayo

JE Cheyre cuadrLas exposiciones del agente Felipe Bulnes y cuatro de los abogados de la delegación chilena ampliaron la argumentación que interpuso nuestro país, objetando la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia en la demanda de Bolivia. Existió una coordinada línea argumental. Su eje central fue probar que el Tratado de 1904 entrega a Bolivia "un derecho perpetuo de acceso al Pacífico". Se desvirtuó la tesis boliviana calificándola como una ficción legal. En ese sentido el agente Bulnes precisó que el verdadero objetivo de Bolivia es que la corte "conceda a Bolivia acceso con plena soberanía al Océano Pacífico, lo que impondrá a Chile la obligación de ceder a Bolivia una porción de territorio que corresponde a soberanía chilena".

A su vez, se resaltó la importancia que la Corte, en su decisión, avale la vigencia de los tratados, lo cual incidirá en la defensa de los límites y la estabilidad de la región.

Se hizo énfasis en la importancia del Pacto de Bogotá. Mención destacada se hizo a la reserva que por largo tiempo mantuvo Bolivia respecto al artículo VI . Esa reserva evidencia el intento que por décadas dicho país tuvo de cambiar los resultados del Tratado de 1904. Hoy la demanda esconde el tratado y su contenido, Bulnes lo sintetiza cuando estableció "un tratado de paz no desaparece porque un país trata de no mencionarlo".

Fue así como la presentación de Chile hizo un ataque quirúrgico directamente orientado a las dos grandes debilidades de la demanda boliviana. La existencia de un tratado vigente que le entrega acceso al mar y, por otra parte, el Pacto de Bogotá, que obliga a la corte a no conocer de asuntos resueltos por tratados anteriores a 1948. Al respecto, la mención al caso Nicaragua Colombia es de alto nivel como precedente.

Al Presidente Morales debe haberle preocupado lo sólido de la posición chilena. De otra manera no se explica que califique a Chile carente de Estado de derecho. Por otra parte, resulta curiosa su arenga al Ejército con la frase "Patria o muerte", donde los militares respondieron "venceremos". Pareciera que no son expresiones de un mandatario que confía en el derecho internacional.

 

Fuente: Voces - La Tercera