Opinión

Triunfo diplomático de Chile en la OEA

El 28 de junio pasado culminó la Asamblea General de la OEA 2024 con el triunfo diplomático de la candidatura presentada por nuestro país en la persona del profesor Claudio Troncoso Repetto para integrar el Comité Jurídico Interamericano de dicha Organización.

El Comité Jurídico Interamericano es una institución más que centenaria en nuestro sistema hemisférico y ha cumplido un gran rol en la codificación y desarrollo progresivo del derecho internacional en nuestro continente. Destaca en ello el rol que tuvo en la elaboración de los instrumentos fundantes de la OEA, en la confección del proyecto de Convención Americana de Derechos Humanos, en el desarrollo de la noción de mar patrimonial (impulsada por el jurista chileno Edmundo Vargas Carreño), que luego se convirtió en la zona económica exclusiva en la Convemar de Naciones Unidas y en la elaboración de la Carta Democrática Interamericana (proyecto liderado por el jurista chileno Eduardo Vio Grossi), por mencionar solo algunos. También ha desempeñado un rol importante en el desarrollo de instrumentos jurídicos en el campo del derecho internacional privado, ya sea a través de tratados o leyes modelos.

El profesor Troncoso Repetto, en su candidatura, hizo hincapié en que además de continuar el desarrollo de temas vinculados a la democracia y los derechos humanos, que configuran parte del ADN de la OEA, el Comité debiera centrar su atención en el perfeccionamiento de instrumentos jurídicos destinados a combatir el crimen organizado transnacional, afrontar la crisis climática en temas como la elevación del nivel del mar y los desastres naturales, y regular temas emergentes como la inteligencia artificial y las actividades en el ciberespacio.

El profesor Claudio Troncoso Repetto, quien es además director jurídico de la Cancillería, tiene una meritoria carrera de más de 30 años dedicados al desarrollo del derecho internacional tanto desde el punto de vista académico como profesional, habiendo también colaborado en la gran reforma a la justicia chilena que me correspondió liderar durante el gobierno del Presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle.

El triunfo de su candidatura, que obtuvo 29 votos de los 32 posibles (con 90%), es un reconocimiento a su talento, pero también responde a un trabajo muy dedicado y metódico de la diplomacia chilena en el ámbito multilateral.

En efecto, este logro se une a la elección de Jorge Contesse como miembro del Comité contra la Tortura, de María Ignacia Vial en el Consejo de Gobierno de Unidroit y de Patsilí Toledo en el Comité de la Cedaw.

Estos triunfos responden, además de la calidad de los candidatos, a la buena imagen de Chile y su gobierno en el mundo y al trabajo muy acucioso y profesional de la Cancillería, liderada por un ministro como Alberto van Klaveren, que destaca por sus cualidades personales y profesionales como un gran canciller.

Fuente: La Tercera