Lentitud en la recuperación económica en Latinoamérica, mayor demanda del Estado pero menor margen fiscal, impacto en la región de la profundidad y velocidad de la recuperación de China, y la definición de una posición de la región frente al conflicto Estados Unidos-China, son las claves de las perspectivas futuras para la región en el contexto geopolítico y económico mundial, de acuerdo a Jorge Sahd, director del Centro de Estudios Internacionales de la Universidad Católica (CEIUC). Sahd, fue invitado el pasado jueves 20 de agosto para exponer en el marco del Ciclo de Sesiones Virtuales organizado por la Cámara Aduanera de Chile.
Felipe Serrano Solar, presidente de la Cámara, afirmó en la oportunidad que “uno de los efectos destacados que ha vivido la sociedad producto del complejo momento como resultado de la pandemia, es que las relaciones sociales y la conectividad se han vuelto indispensables en el día a día. Junto con ello, el crecimiento de las redes sociales y diversas iniciativas de conexión entre personas, empresas y países, hoy deja en evidencia que no estamos solos ni queremos estarlo. Vemos que necesitamos de estos lazos y de la relación con otras sociedades, gobiernos y economías para avanzar con nuestros proyectos”.
A continuación, el director del CEIUC hizo un repaso por las principales condiciones económicas y políticas de las diferentes regiones del mundo, con énfasis en China y Estados Unidos y la rivalidad que tiene enfrentadas a ambas potencias, así como la solidaridad europea ante la crisis, el liderazgo franco-alemán dentro de la región y sus relaciones tanto con Estados Unidos como con China.
Como contexto, reseñó el pesimismo de los países desarrollados frente al futuro económico, el menor impulso político a la globalización, fenómeno que viene de antes de la pandemia; el menor apoyo a políticas de inmigración abierta, la desglobalización económica, un mayor apoyo a políticas proteccionistas, apoyo al comercio global, pero con crecientes dudas sobre sus beneficios, la pérdida de efectividad y relevancia del multilareralismo y la ausencia de acción global.
Sahd recalcó que la tensión entre las potencias va más allá de una guerra comercial, y debe entenderse como una rivalidad estratégica frente a la influencia de cada uno en el liderazgo global. “A mi modo de ver, la rivalidad entre las dos potencias es tan profunda, que puede haber un cambio de estrategia con Biden en el poder, vía aliados o reglas para acorralar a China, por ejemplo, en la Organización Mundial de Comercio, pero la dirección del conflicto va a continuar”, afirmó.
Lo anterior, en un escenario en que Latinoamérica puede llegar a tener entre 2010 y 2020 el peor desempeño económico en 70 años, estimándose que la pobreza post pandemia puede llegar al 40%. Un debate aún sin zanjar es la posición de la región y cada país ante la rivalidad entre las potencias, que por ahora se mantiene en el terreno de la neutralidad. “Lo que hemos tenido como América Latina y Chile hasta el momento, es querer lo mejor de los dos mundos: comerciar con China y profundizar los lazos económicos, pero también mantener la convergencia histórica y de valores con Estados Unidos”, dijo el director del CEIUC al respecto.
Información periodística: Cámara Aduanera de Chile