El pasado viernes 29 de abril se realizó el seminario “Transparencia y lucha anticorrupción: ¿Qué aprender de las experiencias de Dinamarca en Chile?”, actividad organizada por la Embajada de Dinamarca en Chile, el Centro de Estudios Internacionales UC (CEIUC) y el Consejo para la Transparencia (CPLT), y el cual fue transmitido por las plataformas de Radio Bío-Bío.
Participaron en la instancia la historiadora especialista en anticorrupción en el caso danés, Mette Frisk Jensen; el vicepresidente de Transparencia Internacional Capítulo Dinamarca, Jesper Olsen; el abogado y consejero del Consejo para la Transparencia, Francisco Leturia; la oficial del Programa de Chile y Cono Sur de IDEA Internacional, María Jaraquemada y el Director del CEIUC, Jorge Sahd.
Los expertos abordaron las experiencias de ambos países en el combate contra la corrupción. En ese sentido, se presentaron perspectivas históricas y hubo un intercambio de opiniones respecto a las diferentes realidades de la lucha contra la corrupción, centrándose en las diferentes fórmulas que ha utilizado Dinamarca para enfrentar este flagelo.
Para el caso danés, los expertos señalaron la importancia de establecer un marco legal en el país para poder “criminalizar la corrupción” a fin de establecer, principalmente, los deberes de los funcionarios públicos. Además, se destacó la importancia de enfrentar la corrupción de manera coordinada, aludiendo una responsabilidad global sobre el tema.
Si bien se indicó que no existen recetas para enfrentar particularmente la corrupción, los expertos señalaron la importancia que tiene tomar referencias de casos exitosos como los de Dinamarca, aludiendo a tópicos que efectivamente han funcionado para enfrentar la corrupción en casos de éxito, donde efectivamente Chile pueda avanzar.
El seminario concluyó con las palabras del director Sahd, quien señaló la relevancia con la que nuestro país ha enfrentado la corrupción, a través del establecimiento de agendas y por medio de una cultura de integridad. También, manifestó que el fenómeno es más bien regional, siendo relevante comprender el riesgo como un todo y lo que eso significa en términos de desafíos para los gobiernos de América Latina.