En los últimos años, la política comercial internacional ha sido objeto de cuestionamientos. Así, se aprecia que instituciones que siempre gozaron de gran prestigio en la escena comercial, actualmente se han puesto en jaque.
Este es el caso de la Organización Mundial del Comercio (OMC), cuyo principal objetivo es garantizar que los flujos comerciales circulen con la máxima previsibilidad y libertad posible. Esta Organización ha regulado el comercio internacional de bienes, servicios y propiedad intelectual entre sus miembros desde 1995, ofreciendo un marco para negociar acuerdos comerciales y un proceso de solución de controversias. La solución de controversias entre los miembros de la OMC es el pilar central sobre el que se construye el sistema multilateral de comercio. Sin embargo, durante los últimos meses ha enfrentado diversos desafíos, y quizás el más relevante dice relación con el Órgano de Apelación, el cual es parte integral del Órgano de Solución de Diferencias. Esta situación al interior de la organización fue reconocida por los líderes del G-20 quienes expresaron que la OMC necesita mejoras y existe, por lo tanto, el compromiso de "apoyar la reforma necesaria de la OMC para mejorar su funcionamiento."