Los altos grados de inestabilidad y conflictividad existentes en la región de Medio Oriente son noticia de manera diaria. Difícilmente pase una semana sin que escuchemos hablar de los conflictos, las tensiones, la difícil situación en alguno de los países de aquella región. Es por ello que legítimamente podemos preguntarnos cuales son las causas de tales niveles de inestabilidad y si es posible, desde el punto de vista académico, generar un marco analítico que nos permita entender las principales tendencias regionales.
Desde nuestro punto de vista, lo que sucede en Medio Oriente se debe a tres niveles distintos de conflictos, que se dan de manera paralela y que se retroalimentan de manera mutua: conflictos domésticos o internos, conflictos en el orden regional y conflictos globales que impactan en la región.
Si bien es posible identificar a lo largo de las últimas décadas momentos en los cuales se han dado conflictos en alguno de esos tres niveles, nunca se dieron en los tres niveles al mismo tiempo, y eso explicaría, la situación de la región en la actualidad.