“América Latina inicia un nuevo año caracterizado por un escenario de creciente desafección democrática, el avance del populismo y nuevas tendencias autoritarias“. De esta forma inicia el tercer capítulo de la publicación “Riesgo político América Latina 2024”, hecho por el Centro de Estudios Internacionales UC (Ceiuc).
De acuerdo al estudio, lo que se vive en la región es un cuestionamiento al régimen y en los últimos veinte años la regresión democrática ha sido “continua y profunda”. El 60% de los países de este lado del mundo ya no son democráticos, indica.
El último informe del Índice de la Democracia 2022 señala que en América Latina solo tres países son democracias plenas: Uruguay, Costa Rica y Chile. En tanto, Panamá, Argentina, Brasil y República Dominicana tienen democracias incompletas. Por otro lado, ocho países son regímenes híbridos (Perú, Paraguay, Ecuador, México, Honduras, El Salvador, Bolivia y Guatemala) y cuatro son autoritarios (Haití, Cuba, Nicaragua y Venezuela)”.
Apoyo a la democracia cae 15 puntos
Según la publicación, “en comparación con las otras regiones analizadas en el índice, América Latina presenta la mayor recesión democrática durante las dos últimas décadas”. Y entre los ciudadanos “crece el descontento con la democracia por la falta de resultados”. La última encuesta de Latinobarómetro (2023) registró que hubo una disminución de 15 puntos desde el 2010 con respecto al apoyo a la democracia. Desde 63% bajó a 48%.
Una tendencia al alza es que en los últimos veinte años el porcentaje de personas que estarían dispuestas a aceptar un régimen no democrático si le solucionan los problemas ha aumentado de 44% al 54%. Esto, “evidencia una mayor tolerancia a líderes populistas y/o autoritarios”.
“Por favor, dígame si está muy de acuerdo, de acuerdo, en desacuerdo o muy en desacuerdo, con No me importaría que un gobierno no democrático llegara al poder si resuelve los problemas”, fue la pregunta que hicieron en la encuesta.
El que país que más estuvo de acuerdo fue Honduras con un 70%, seguido por Paraguay (68%), Guatemala (66%), República Dominicana (63%), El Salvador (63%) y Venezuela (60%). Después se ubicaron Ecuador (58%), México (56%), Colombia (54%), Bolivia (54%), Brasil (53%) y Panamá (53%). En la parte baja de la tabla se ubicaron Perú (495), Costa Rica (43%), Chile (41%), Uruguay (40%) y Argentina (38%).
Líderes políticos
Como consecuencia de la frustración generalizada con la democracia, sostiene el texto, emergen candidatos personalistas, anti-élite y populistas, que pueden ser de derecha o de izquierda. Pero, en todos los casos, “representan un serio riesgo por los rasgos autoritarios de sus líderes y su forma anti-institucional de gobernar”.
Un caso de la afirmación anterior es Javier Milei, en Argentina, quien “reniega del consenso social respecto a la última dictadura y la violación a los derechos humanos”. En Perú, Pedro Castillo también es un ejemplo, siendo un anti-élite de izquierda, quien “llegó al poder y en menos de un año y medio intentó, sin lograrlo, un autogolpe para cerrar el Congreso e intervenir el poder judicial”.
“La preservación y fortalecimiento de la democracia en América Latina es un desafío que requiere una atención urgente y un compromiso conjunto de la sociedad, los líderes políticos y la comunidad internacional. Ese necesario restablecer el consenso democrático e impulsar los valores de una cultura política democrática“, concluye la publicación sobre este tema.
Fuente: The Clinic